Te descolgó como se descuelga a un cuadro, hizo de cuentas que no existes, entonces con resignación dijiste, “no es la primera vez que he pasado por un desaire de este tipo, y seguramente no será la última”.
Traté de consolarte, argumentando estupideces.
En fin después de un rato de elucubraciones varias concluímos lo de siempre, hay que disfrutar los momentos segundo a segundo, como si fueran frutas, degustando intensamente su sabor, o como si fueran flores, alegrándose con el estallido de sus colores, aun sabiendo que hay flores que tienen espinas.
Ahora a esperar amiga mía el renacer después de la partida y este dolor de esa no despedida, considéralo como lo que es, una verdad absoluta de la vida, todo algún día termina.
María Pilar
Todo algún dia termina...
ResponderBorrarY siempre es mejor lo que sucede...
Tal vez, esta tan sólo sea un oportunidad en el medio del caos...
Saludos querida Pilar...
La semana pasada escribí El Pájaro:
ResponderBorrarEl amor es un pájaro
Que se posa en nuestra ventana
una mañana de otoño
Primero no lo vemos
O pensamos que volará de inmediato
Sin embargo se queda
todas las mañanas de ese otoño tibio
Y nos hace felices
como nunca imaginamos
Lo alimentamos
Y él canta
Pero luego dejamos
de asomarnos a la ventana
Porque su canto llega
hasta adentro de la casa
Y a veces nos olvidamos de alimentarlo
O tal vez al pájaro
ya no le gusta nuestra comida
Y un buen día se echa a volar
No nos damos cuenta enseguida
Porque ya es primavera
y muchos pájaros cantan
Entonces corremos hasta nuestra ventana
Y tan misteriosamente como llegó
En aquel otoño, ahora mítico
Se va
Y esta primavera se nos vuelve fría
No es culpa de nadie
Así es la naturaleza de cambiante
Tal vez si tenemos suerte
Algún día
Escuchemos otro canto
En nuestra ventana.
Pero ahora no podemos pensar en eso
Ahora sólo podemos pensar
En aquel otoño tibio
En que el pájaro frágil y sonriente
Se posó en nuestra ventana
Por primera vez.
Onix: creo en tus palabras, es sólo una oportunidad en medio del caos, solo hay que saber esperar.
ResponderBorrarCariños
Marcelo: Preciosa ésta metàfora del amor que compusiste, tiene un todo envuelto en seda nostálgica que lo hace real e irreal.
ResponderBorrarCariños y gracias por compartírmelo.
Hay que disfrutar esos momentos... segundo a segundo...
ResponderBorrarAlgo tristes tus versos pero con muy buena reflexión.
Un placer leerte.
Saludos.
Excelente blog,
ResponderBorrarUn saludo.
Eso se llama solidaridad con el derrotado, Pilar. En este caso de tu amiga, derrotada...en verdad.
ResponderBorrarPero dile que el sol se esconde...y vuelve a salir.
Cariños.
Salvador bienvenido, gracias por tu comentario, devolveré la visita
ResponderBorrarPilar
Franco, gracias por tu visita.
ResponderBorrarEsteban, de solidaridad dicen que sabemos los chilenos, cariños y gracias por venir.
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