Me elevo desde el suelo,
desplazo ondeante mi figura,
como si fuera la dueña,
¡y sólo soy pasajera!
Impropia, mujer, impropia,
invento de mi conciencia,
estampa que se siente muy segura de si misma,
M. Pilar O.
Amigo,
Cuando nuestros pasos medimos en esta lluvia de otoño
nuestro corazón galopa y se agita como la mar del Cabo
hasta correr sereno como manantial andino.
Nadie otea nuestro horizonte
no hay asombro en las estrellas
nadie nos apaga el sol, ni nos enciende la luna
Es la vida misma
que nos lleva en su calesita dorada
a seguir probando la rueda de la fortuna.
Sin mediar palabras, sin nombrarte
valoro el camino que juntos andamos
mi pensamiento en todo momento
te acoge y estoy sin estar
siempre contigo
y estas, sin estar
siempre conmigo.
M. Pilar O.
VERDAD O MENTIRA En un mundo de misterio color océano en días de tormenta invisibles púas ata...