Ruido de turbinas te anuncian
el nudo en el estomago aparece,
más fuerte rugen los motores
y mis oídos ensordecen.
Al elevarte
se amotinan mis miedos
entre el temor y el vacío
me reconozco simple y debil,
entre tantos distintos pasajeros
esta altura nos iguala.
Pienso en mi encuentro con Dios
nada puedo ante sus designios.
es solo un segundo
un respiro
que nos separa de lo eterno
se hace ese segundo ¡tan certero!,
todo escapa a nuestra voluntad
simplemente me entrego.
Caminodesur.
el nudo en el estomago aparece,
más fuerte rugen los motores
y mis oídos ensordecen.
Al elevarte
se amotinan mis miedos
entre el temor y el vacío
me reconozco simple y debil,
entre tantos distintos pasajeros
esta altura nos iguala.
Pienso en mi encuentro con Dios
nada puedo ante sus designios.
es solo un segundo
un respiro
que nos separa de lo eterno
se hace ese segundo ¡tan certero!,
todo escapa a nuestra voluntad
simplemente me entrego.
Caminodesur.
en el cielo caben todos nuestros sueños y miedos...es azul y quiebra la voluntad hasta hacernos ser pequeños y dóciles...besos
ResponderBorrarHermoso amiga!
ResponderBorrarSin duda una bella manera de describir ese "vuelo" que de repente nos soprende.
Esa sensación de volar -entre sonidos de turbinas indelebles- que nos provoca esa persona especial.
Pero siempre "la altura nos iguala" y es lo más bello!
Sobre todo la entrega en los aires y en los cielos!!
Un enorme abrazo Mari Pili! y muchas felicidades por estas bellas letras!!!!
Besos desde México!
Alas para elevarnos desde la tierra donde quedará la nada, luego quién sabe quienes que nos aguardan, pero prefiero volar para verlo todo tan ínfimo, eso sí que no dure muchas horas que cansa la travesía nocturna.
ResponderBorrarBueno estoy pidiendo demasiado.
Saludos.
Me gusta este sitio, habla de nómadas de viento de cruces y caminos y de vuelos y de puentes? bién.
ResponderBorrarun saludo
La fragilidad del ser humano, de la vida... qué bello! y bella imagen...
ResponderBorrarCariños y saludos!
Cardo.
Fue interesante leer esto; muestra un poco de miedo o al menos eso percibo..Es algo existencialista, tocado desde un punto muy sutil. Bien hecho.
ResponderBorrarque tendrán los cielos que nos cautivan? Saludos brujos
ResponderBorrarGracias por visitarme, tu blog realmente me encantó, visual y sensorialmente...una delicia. Una oda al buen gusto...ese que muchas veces me falta:)
ResponderBorrarVoy a linkearte, espero no haya objeción.
Un gran abrazo desde la capital...que a muchos nos tiene con alergia y añorando el Sur nuevamente:)
Hola Bichito!!!. Estoy muy bien...lo que pasa es que estoy haciendo horas extras en el trabajo y llego muy tarde a casa....y muy cansada!!!!!!!!. Ya me voy a poner al dia...espero que vos tambien estés bien...esperaba conocerte.....
ResponderBorrarBesos
Bichito, te entiendo perfectamente!! Esa sensación de ser vulnerable a bordo de...de ser tan pequeño en ese cielo tan amplio, de sentir que estás alcanzado alturas que están fuera de lo natural para el ser humano. Y de algo incontrolable dependen todas esas almas que vuelan...esperando aterrizar.
ResponderBorrarNo sabes lo mucho que me identifico con estas palabras.
Un abrazo desde el Levante.
Bonitas palabras para describir lo que sientes tocando el cielo.
ResponderBorrarMe gustan tus fotos, la de la casa de adobe es preciosa.
Otro abrazo desde el Levante
Le dejo mis cálidos salud-os de un humilde aprendiz de poeta.
ResponderBorrarefectivamente es como el miedo a volar....
ResponderBorrarlas nubes, y vpolr de todos los campos sagrdaos y ajenos que no representan los miedos.
ResponderBorrarPor mi ciuudad, hay un kinder llamdo bichito de luz; me trajo esos recuerdos.
saludos.
Buenas! vuelvo a visitar tu blog, y veo que tienes cantidad de cosas interesantes! Las fotos de "Crepúsculo violeta" me han gustado mucho.
ResponderBorrarsaludos!
Agradezco a todos su paso por este lugar y sus palabras.
ResponderBorrarCompartir estas imágenes e impresiones es importante para mí.
Abrazos desde este sur.