En el vuelo
Ruido de turbinas te anuncian el nudo en el estomago aparece, más fuerte rugen los motores y mis oídos ensordecen. Al elevarte se amotinan mis miedos entre el temor y el vacío me reconozco simple y debil, entre tantos distintos pasajeros esta altura nos iguala. Pienso en mi encuentro con Dios nada puedo ante sus designios. es solo un segundo un respiro que nos separa de lo eterno se hace ese segundo ¡tan certero!, todo escapa a nuestra voluntad simplemente me entrego. Caminodesur.