Santiago
Santiago , de variable rostro cabeza blanca en fríos inviernos mirada turbia antes de la lluvia luminoso después de un aguacero. Capital de dirigentes girasoles niños habitando caletas adultos de mirada perdida, vestidos de culto ropaje cuando el Municipal abre sus puertas selectivas. En tus parques eres joven defensor de ideales bebedor de cerveza y vino, tu sentido social aflora en improvisados albergues , que protegen al indigente del frío. Eres corazón humilde madrugando buses , espíritu cosmopolita entre las finas líneas del metro , nobleza cultivada en estaciones recicladas. Santiago contrastas en cada esquina la ciega altivez de un todo terreno sin sueldo máximo con el malabarista de la vida sin sueldo mínimo. Opones a la bizarra solidez de las arterias que te inervan tanto evento en ruinosas avenidas. Tu atmósfera, inundada de aires fatigosos soplo insuficiente no alcanza a mezclar los olores de tu valle